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Darinka exige pensión y protección ante violencia de Farfán.

  • owenvalencia20
  • 11 abr
  • 2 Min. de lectura

En un reciente conflicto legal, Darinka Ramírez Lozano, madre de la segunda hija del exfutbolista Jefferson Farfán, ha presentado una solicitud ante el Poder Judicial en la que exige medidas de protección urgentes para ella y su pequeña. En el expediente, registrado en el 15 Juzgado de Familia Especializado en Violencia Contra la Mujer e Integrantes del Grupo Familiar, Darinka pide que Farfán no se acerque a menos de 200 metros de su domicilio y que se le prohíba llevarse a su hija.


La solicitud, hecha a través de su abogada, detalla un conjunto de exigencias que busca salvaguardar la integridad física y emocional de Darinka y su hija. Se inicia con la petición a las autoridades de que Jefferson cesa de inmediato cualquier tipo de violencia familiar, que incluye agresiones psicológicas, insultos, humillaciones y acoso, advirtiendo que de no cumplirse, podría enfrentar cargos penales.


Además, Darinka exige que el exfutbolista sea sometido a terapia psicológica y que se le restrinja el uso de terceros para llevar a cabo actos de hostigamiento o vigilarla. Su intención es garantizar que la comunicación con Farfán se limite exclusivamente a la coordinación de la pensión alimentaria y las visitas a su hija.


En su declaración, Radinka también resalta la necesidad de que Farfán continúe cubriendo los costos del departamento donde residen, así como los gastos de servicios y el salario de su ayudante doméstica. Específicamente, solicita que cumpla con una pensión alimentaria de 3500 soles mensuales, argumentando que, al ser consciente de la denuncia, podría intentar eludir sus responsabilidades financieras.


Con el objetivo de asegurar su seguridad, Darinka ha pedido la implementación de un botón de pánico y patrullajes en su hogar, subrayando su vulnerabilidad y el riesgo que representa para ambas. Su demanda ha sido respaldada por una evaluación psicológica reciente en el Centro de Atención AURORA, que revela el profundo impacto emocional que la relación con Farfán ha tenido en ella.


En el informe, Darinka comparte un ejemplo que evidencia la tensión de su convivencia con el exjugador: “Es la primera vez, él fue a visitar a mi hija, estaba en la sala con su primo, jugando con los juguetes de mi hija. Le pedí que tuviera cuidado y me dijo: 'Lárgate, porque yo puedo comprar mil juguetes; la vida que tienes es por mí, te vas a regresar a tu casa, te alimentas de mi pensión'”.



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Durante las sesiones, también explicó la naturaleza de su relación con Farfán. “Desde el 2020, que conocí al padre de mi hija, tuvimos un vínculo cercano, íntimo, pero no éramos pareja. Mas no fue una relación formal, pero sí pernoctaba en mi domicilio hasta diciembre del 2024”, añadió.


A raíz de esta situación, la especialista que evaluó a Darinka concluyó que presenta un daño psicológico moderado, lo que refuerza la necesidad de las medidas cautelares solicitadas para proteger su bienestar y el de su hija.

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